Soledad

En el cuarto oscuro estas esperando pacientemente que el sol esconda su luz.

Esperas hasta el final del día cuando las risas de los niños ya no se oyen.

Conviertes la brisa fresca de la noche a un soplo de inseguridad congelador que haría hasta a los pingüinos clamar por un poquito de calor tropical.

Aun con la presencia de la luna, encuentras la manera para convertir el recordatorio del sol a una señal de mal agüero.

Esperas a  cuando apago las luces y todos mis seres queridos se han ido a descansar para meterme el puñal podrido en el veneno de la depresión  que solo tu sabes dar.

Tan potente es que haría hasta un pes pensar que no le pertenece al mar.

Solo tú tienes el poder de hacer hasta la misma cama en la que suelo dormir para descansar y refrescar mi mente.

A una prisión donde lo único que consigo es sentirme solo y peor que un delincuente.

No entiendo por que razón te fascinas con destruir mi corazón y alma cada noche

¿Acaso he cometido un pecado sin perdón?

¿Por que me haces ver como los que hacen el mal ríen, gozan y tienen quien los espera con brazos abiertos?

Lastimosamente se que siempre estarás presente no importa que tan alto llegue, ni que tan bajo me esconda

Ahí estarás siempre dispuesta a acobijarme con ese manto de tristeza

También estarás lista para acomodar mi cabeza en la almohada de mis frustraciones

Sin olvidar, por supuesto, las canciones de cuna al son de los recuerdos de los insultos que he recibido en esta vida.

Escribo esta nota, no con la idea de exaltar tus obras

Tampoco escribo para quejarme de ti, si algo tienes de bien es que jamás me has sido infiel, siempre has estado ahí y para detallista, no hay ser quien se pueda igualar a ti.

Más bien escribo con la intención de decirte por primera vez tu nombre.

Para que cada noche en la que me aseches y quieras llamar mi atención, no creas que no sepa que existes.

Quiero que sepas que al igual que yo me uno a las masas en total solidaridad

En la lucha en contra de ti...

 Soledad.